Las técnicas cromatográficas están ampliamente extendidas y su enorme aplicación se debe a su elevada sencillez, bajo coste y gran eficacia de separación.
- Análisis cualitativo: la cromatografía es una herramienta muy empleada para identificar determinados componentes en mezclas sencillas de composición conocida. esta identificación se hace a partir de la evaluación del tiempo de retención observable en el cromatograma.
- Análisis cuantitativo: los métodos cromatográficos proporcionan una valiosa información cuantitativa acerca de las especies separadas, mediante la comparación de las alturas o las áreas de los picos, con una sensibilidad que supera en muchas ocasiones a la de otras técnicas.
Análisis basados en la altura del pico
Se pueden realizar estudios cuantitativos de las muestras separadas a partir de las alturas de los picos cromatográficos. La mayor precisión se consigue cuando tenemos picos bien definidos, agudos, estrechos y simétricos. Hay que tener en cuenta que la altura es inversamente proporcional a la anchura del pico, por lo que este método se ve muy afectado por las condiciones experimentales (temperatura de la columna, caudal de la fase móvil, velocidad de inyección de la muestra…), por lo que su aplicación es limitada. Puede ser útil en ensayos de rutina o en aquellos en los que se prefiera una mayor rapidez, aunque se pierda exactitud.
Análisis basados en las áreas de los picos
Las áreas de los picos son independientes de la anchura, por lo que estos análisis son más precisos que los basados en las alturas de los picos, aunque su lectura sea más sencilla. Una forma de estimar el área de los picos es multiplicar su altura por el ancho a la mitad de su altura. En realidad, la mayoría de los cromatógrafos actuales incluyen sistemas de integración electrónicos y programas informáticos que permiten que el analista pueda determinar con precisión las áreas de los picos.

método de calibrado
El método más sencillo para llevar a cabo un análisis cuantitativo de una muestra mediante cromatografía implica la preparación de una serie de disoluciones patrón de concentración conocida y de composición similar a la muestra. Con la información obtenida en el cromatograma, podemos reallizar una representación de las áreas o las alturas de los picos en función de las respectivas concentraciones, que permitan establecer una relación lineal que nos servirá para determinar la concentración de la muestra problema.
El error más habitual deriva de la incertidumbre en el volumen de la muestra, que puede ser realmente importante al tratar con muestras de volumen muy pequeño. Por ello, suelen emplearse dos métodos que solucionan este problema:
- Método del patrón interno: se introduce en cada estándar y en la muestra una cantidad exactamente medida de otra sustancia que llamamos patrón interno, cuyo pico cromatográfico esté bien diferenciado. De esta manera, en lugar de utilizar las áreas/alturas de los picos, tomaremos como parámetro analítico la relación existente entre las áreas/alturas de los picos del analito y del patrón interno. Así, aunque haya imprecisión en el volumen inyectado, la relación entre analito y patrón interno no se verá afectada.
- Método de la normalización de las áreas: en este caso se procederá a la elución completa de todos los componentes de la muestra para determinar las áreas de todos los picos, siendo el parámetro analítico la relación de su área con el área total de los picos. Para poder emplear este método debemos tener mezclas que en las condiciones en las que trabajemos se puedan eluir todos los componentes en un tiempo razonable.